Este histórico establecimiento tristemente desaparecido, conformó en parte la fisonomía de la Plaza del Ayuntamiento entre 1928, año de su inauguración, hasta finales del pasado siglo XX. Se encontraba en los bajos del edificio proyectado por Javier Goerlich, quien también decoró este establecimiento en el encuentro de la calle Ruzafa con Ribera, dando fachada también a una de las esquinas de la Plaza del Ayuntamiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario